La creencia en visitas extraterrestres crece y empieza a influir en la política

La creencia de que los extraterrestres han visitado la Tierra está ganando terreno, y no solo entre aficionados a la ciencia ficción. Estudios recientes muestran que una proporción significativa de la población, tanto en el Reino Unido como en Estados Unidos, cree en la existencia de ovnis y en la posibilidad de que estos sean evidencia de vida extraterrestre. En EE. UU., donde esta creencia es más extendida, alrededor del 34% de las personas considera que los avistamientos de ovnis podrían ser prueba de seres de otros planetas. Esto ha tenido un impacto en el discurso político, llevando a varios líderes a responder preguntas sobre el tema.

La influencia política no se ha hecho esperar, y en los últimos años, se han presentado proyectos para forzar al Pentágono a divulgar información clasificada sobre los denominados Fenómenos Anómalos No Identificados (FANI). Figuras políticas, como Hillary Clinton y el líder demócrata del Senado Chuck Schumer, han impulsado la apertura de archivos secretos que supuestamente contienen información sobre estos fenómenos. Sin embargo, hasta el momento, no se ha revelado evidencia concreta que confirme la existencia de vida extraterrestre o visitas de otros planetas.

El problema radica en que esta creciente creencia en extraterrestres y ovnis está alimentando teorías conspirativas que erosionan la confianza en las instituciones públicas y generan desinformación. En lugar de confiar en la ciencia, una parte de la población prefiere teorías que señalan a los gobiernos y a una élite secreta como responsables de ocultar la "verdad" sobre los extraterrestres.

Si bien este tipo de historias puede parecer inofensivo o meramente entretenido, socavan la comunicación científica seria sobre la posibilidad de vida extraterrestre. La ciencia, con investigaciones como la astrobiología, busca respuestas reales y basadas en pruebas, pero tiene un alcance mucho menor en comparación con la cultura popular que rodea a los ovnis.

Además, algunas de estas teorías conspirativas han intentado apropiarse de narrativas y mitologías indígenas, distorsionando su significado y transformándolas en relatos de ciencia ficción. Lo que antes era un campo de estudio histórico y cultural se ve ahora ensombrecido por especulaciones sobre alienígenas ancestrales.

Aunque el debate sigue abierto, la falta de pruebas y el crecimiento de estas creencias siguen planteando problemas para la sociedad y para el diálogo político, científico y cultural. En última instancia, la cuestión no es si los extraterrestres nos han visitado, sino cómo esta idea está influyendo en la percepción pública y en la toma de decisiones en diferentes ámbitos.