Lenovo Yoga Slim 7i Aura Edition: análisis completo y rendimiento del chip Lunar Lake

El Lenovo Yoga Slim 7i Aura Edition se lanza al mercado con el esperado procesador Intel Lunar Lake, demostrando mejoras en rendimiento y eficiencia energética. Este chip promete avances notables, con un 5% más de velocidad en tareas de un solo núcleo frente a sus competidores Snapdragon y AMD. En pruebas intensivas, mantiene una batería que dura hasta 11 horas, lo que es impresionante considerando su pantalla LCD de 15.3 pulgadas con 120 Hz de refresco y 500 nits de brillo.

La experiencia de usuario destaca por un teclado táctil y puertos versátiles, como HDMI 2.1 y Thunderbolt 4. Sin embargo, el touchpad presenta problemas significativos: es rígido y menos preciso, una desventaja para quienes buscan comodidad. Además, el software preinstalado puede ser molesto, con notificaciones invasivas para servicios de pago. Otro inconveniente es su webcam de calidad mediocre y un botón de encendido mal ubicado, que frecuentemente se activa por error al transportar el dispositivo.

El rendimiento gráfico con la GPU Arc 140V se queda corto en comparación con otros portátiles premium, especialmente frente al Zenbook S 16 de AMD con pantalla OLED y mejor desempeño visual. Si bien el Yoga Slim 7i destaca por su equilibrio general, la competencia ofrece opciones más refinadas, como el MacBook Air de 15 pulgadas y laptops con Snapdragon que superan su batería.

Este lanzamiento muestra el potencial de Intel, pero también resalta los desafíos que enfrenta frente a rivales de ARM y AMD. La evolución de x86 es interesante, pero los usuarios deben valorar si las novedades justifican el precio.