Reinicio automático de iPhones complica acceso policial a evidencia digital

La reciente introducción del iOS 18 ha causado alarma entre las fuerzas policiales de Detroit, quienes reportan que algunos iPhones bajo custodia comienzan a reiniciarse misteriosamente, volviendo a un estado de seguridad más restrictivo. Este fenómeno representa un obstáculo para las investigaciones, pues tras cada reinicio los iPhones retornan al modo Before First Unlock (BFU), una configuración que dificulta el acceso a datos y limita considerablemente la cantidad de información recuperable.

Los iPhones en estado After First Unlock (AFU) permiten una extracción de datos más amplia usando herramientas forenses como Cellebrite, pero cuando un iPhone en esta condición se reinicia, vuelve a un nivel de seguridad mayor (BFU), donde solo se puede extraer información del sistema y contenido de caché. Este cambio en la configuración reduce el acceso a datos clave como mensajes, contactos y otros elementos generados por el usuario, limitando las posibilidades de investigación.

¿Una medida de seguridad o una anomalía?

Las autoridades no están seguras de si estos reinicios automáticos son parte de una nueva característica de seguridad en iOS 18, y el misterio se agrava porque los teléfonos también se reinician incluso en modo avión y dentro de cajas de Faraday, que bloquean las señales externas. La teoría actual sugiere que los dispositivos pueden estar comunicándose entre sí, o que la proximidad con otros iPhones en el laboratorio provoca los reinicios.

El documento obtenido por 404 Media señala que los investigadores no saben bajo qué condiciones exactas se producen los reinicios, pero han observado patrones que vinculan este comportamiento a la versión iOS 18. En uno de los casos, se sospecha que el teléfono personal de un agente, al estar en proximidad, desencadenó el reinicio en otros dispositivos.

Implicaciones para las investigaciones y la preservación de evidencia

El efecto de estos reinicios va más allá de la simple frustración técnica. Al perder el estado AFU, los iPhones pasan a un modo donde es mucho más complicado extraer datos, haciendo que se pierda acceso a evidencia clave. Como precaución, se recomienda a otros laboratorios que mantengan inventarios y aíslen los dispositivos en AFU para evitar estos reinicios.

Este fenómeno plantea un nuevo desafío en el acceso a la tecnología en investigaciones y reabre el debate sobre privacidad y seguridad en dispositivos personales, balanceando los derechos de privacidad de los usuarios con las necesidades de las autoridades.