Hyundai vuelve a incluir botones físicos en sus autos tras rechazo a las pantallas táctiles

La era de la pantalla táctil parece haber llegado a su fin para Hyundai. Tras años apostando por interfaces completamente digitales en el interior de sus vehículos, el fabricante surcoreano ha tomado una decisión radical: volver a integrar botones físicos en el diseño de sus autos. ¿La razón? Los conductores han expresado su frustración con los controles táctiles, especialmente para funciones esenciales como el aire acondicionado o el volumen de la música.

Según Ha Hak-soo, vicepresidente de diseño de Hyundai Norteamérica, la empresa descubrió en grupos de prueba que los usuarios experimentaban “estrés y frustración” al intentar ajustar controles importantes mediante pantallas táctiles, especialmente en situaciones de conducción intensa. Aunque Hyundai, como otras marcas, había caído en la fiebre de las pantallas, pronto reconocieron que esta no siempre es la mejor opción para todos.

El renacimiento de los botones en el diseño automotriz

Esta vuelta a lo físico ya se puede ver en el Hyundai Ioniq 6, uno de los modelos eléctricos más recientes de la compañía. Este vehículo, aunque aún incluye una gran pantalla táctil, también ha devuelto los botones y perillas al centro de control de ciertas funciones, como el volumen y otras configuraciones del vehículo. Sin embargo, algunos controles de clima siguen siendo táctiles, algo que sigue causando opiniones divididas.

Kevin Kang, director de diseño de interiores de Hyundai Norteamérica, señaló que aunque se está priorizando el uso de botones para el presente, en el futuro los autos autónomos podrían dar paso nuevamente a interfaces táctiles o incluso a comandos por voz. Pero, por ahora, la compañía está escuchando a sus clientes, quienes piden controles más intuitivos y confiables, especialmente para las funciones que usan con frecuencia.

El debate sobre las pantallas y la seguridad

El auge de los controles táctiles en los autos ha suscitado preocupación en cuanto a la seguridad. Europa planea bajar las calificaciones de seguridad de los autos que dependen excesivamente de pantallas táctiles a partir de 2026, considerando que la necesidad de mirar la pantalla para ejecutar ciertas funciones puede ser una distracción para el conductor. Aunque los controles de voz se postulan como una alternativa futurista, no todos son optimistas al respecto. Por ejemplo, Wassym Bensaid, ejecutivo de Rivian, sugiere que los comandos de voz son el futuro de los controles automotrices, una idea que para muchos podría hacer más fácil y seguro el uso de ciertos sistemas. Sin embargo, ¿será realmente una mejora? Imagina tratar de hablar con el auto mientras el ruido del tráfico o una calle llena de baches te interrumpen.

Hyundai, en su esfuerzo por crear una experiencia de conducción más placentera, parece haber dado en el clavo con esta decisión de simplificar el manejo de sus autos. A fin de cuentas, los avances tecnológicos deberían facilitar nuestras vidas, no complicarlas. A veces, los botones físicos, con su toque simple y funcional, pueden superar a las pantallas táctiles en su capacidad de responder en el momento preciso. Porque, cuando estás en el volante, lo último que quieres es luchar con una pantalla táctil. Quizás el avance real no sea eliminar los botones, sino hacer que la tecnología sea más intuitiva y cercana a las necesidades humanas.