El iMac M4: ¿con un formato que ya no convence?
El nuevo iMac M4 de Apple es tan hermoso y funcional como siempre, pero su formato todo en uno comienza a sentirse limitado en un mundo donde los portátiles y los monitores independientes dominan la escena.
2024-11-25T12:01:15.749Z - Felipe Sarmiento

"El iMac M4 es un tributo al diseño, pero se siente atrapado en un universo donde las laptops nunca triunfaron."
El principal atractivo del iMac M4 sigue siendo su diseño todo en uno. La integración de monitor, procesador, altavoces, micrófonos y webcam en un solo dispositivo ofrece un escritorio limpio y organizado. La calidad de los componentes integrados, como los altavoces de rango completo y la cámara de 12MP con Center Stage, hace que sea ideal para videollamadas profesionales o un uso multimedia avanzado.
Además, el chip M4 garantiza una experiencia fluida para las tareas más comunes y promete varios años de rendimiento sólido gracias a la eficiencia de Apple Silicon. La inclusión de 16GB de RAM en el modelo base es una decisión acertada, eliminando cuellos de botella que afectaban a las generaciones previas.
¿Dónde flaquea?
A pesar de sus virtudes, el formato del iMac comienza a sentirse anticuado en un mundo donde las laptops y los monitores modulares ofrecen mayor versatilidad. Algunas de sus limitaciones más notables incluyen:
Pantalla no ajustable: El soporte integrado no permite ajustar la altura, y aunque existe una opción con montaje VESA, esta requiere adquirir soportes adicionales.
Conectividad limitada: Solo cuenta con cuatro puertos USB-C, dos de ellos Thunderbolt en el modelo base. Esto significa que los usuarios con periféricos más antiguos dependerán de adaptadores y dongles, algo poco ideal para un escritorio "minimalista".
Relación precio-beneficio: El modelo base tiene carencias significativas, como la ausencia de un teclado con TouchID, que obligan a los usuarios a gastar al menos $200 adicionales para obtener una configuración más completa.
Comparativa con otras opciones de Apple
El problema central del iMac M4 es que otras opciones dentro del ecosistema de Apple ofrecen más flexibilidad por un precio similar o menor.
Mac Mini: Por $1,000 menos, podés adquirir un Mac Mini con las mismas especificaciones y usar el dinero restante para un monitor de mayor tamaño y calidad, junto con los periféricos de tu preferencia.
MacBook Pro: Si buscás portabilidad, el MacBook Pro con M4 tiene un rendimiento similar al del iMac, pero incluye una pantalla de alta calidad, batería de larga duración y una gama más amplia de puertos. Además, podés conectarlo a un monitor externo cuando necesités más espacio de trabajo.
¿Para quién es el iMac M4?
El iMac M4 tiene un público objetivo muy específico: usuarios que valoran la estética por encima de la flexibilidad. Es ideal para espacios donde el diseño importa tanto como la funcionalidad, como recepciones, salas de espera o escritorios minimalistas en oficinas creativas. También puede ser una opción adecuada como computadora familiar en un espacio común del hogar.
Sin embargo, para la mayoría de los usuarios, una solución más modular, como un Mac Mini o un MacBook Pro, es más práctica y económica, especialmente cuando se considera la velocidad con la que los monitores evolucionan en resolución, tamaño y características.
El iMac M4 es, sin duda, una de las computadoras más hermosas del mercado. Pero su enfoque en el diseño por encima de la flexibilidad lo convierte en un producto de nicho en un mundo donde las laptops dominan y los monitores independientes ofrecen cada vez más versatilidad. Si bien puede ser una compra emocionante para quienes buscan un dispositivo todo en uno de calidad, la mayoría de los usuarios encontrarán mejores opciones en otros productos de Apple.
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